Cuando el término 'chicano' fue creado, servió como un designo de condición social humilde para los mexicanoamericanos de Los Angeles. Este sentido semántico sobrevivió por tres decadas, hasta que se convertió en un indicador de orgullo étnico en los anos sesenta.

El habla de los chicanos se caracteriza como una mezcla del español mexicano con préstamos léxicos del inglés. Toma influencias de todos los grupos lingüisticos del suroeste, incluyendo el español estándar más cercano y ciertas variaciones rurales. El componente patrón viene del norte de méxico y la habla común de la región es típica del espanol de nuevo méxico, populado por los colonizadores en el siglo XVI. Este español se combina con el inglés hablado por los biligües para crear un modo único a la área.

Uso estándar -> no estándar

También se puede encontrar fenómenos de habla popular del mundo hispánico en la lengua chicana. Por ejemplo, la articulación relajada del español andaluz y canario requisita la pérdida de las vocales átonas (acabar -> cabar). El alzamiento de vocales medias (entender -> intender), el rebajamiento de vocales altas (injusticia -> enjusticia), y la diptongación de hiatos (golpear -> golpiar) son comunes.

Consonantes

Otras calidades del español chicano resultan de formas populares, como:

Bibliografía

Azevedo (1992), pp. 375-378.



Dialectología española
última revisión 07 mayo 1996, Nora Gordon