La influencia que tuvieron los indígenas en el español
fue un proceso complicado debido al choque de dos culturas distintas.
Los conquistadores tuvieron que recurrir a diferentes procedimientos
para comunicarse con los indígenas. Lo primero que los
conquistadores hicieron al llegar América fue tomar unos
cuantos indios cautivos para luego utilizarlos como intérpretes.
Otro procedimiento fue la integración de los conquistadores
con los indios entrando en sus vidas y costumbres. El indio-intérprete
fue el primer paso que los conquistadores utilizaron para su aproximación,
estableciendo con ellos una convivencia estable que se manifestó
en tres maneras: en el trabajo, en el mestizaje, y en la catequización.
Las Instrucciones Reales en la primera época se involucraron
en la enseñanza del español y ordenaron que todos
los indios se agruparan en pequeños pueblos para poder
ser adoctrinados y además que construyeran una iglesia
y que se designara a un capellán que les enseñara
a leer y a escribir a los niños y esto era generalmente
en latín. Las Instrucciones también especificaban
que a los caciques y a los indios se les enseñara a hablar
castellano.
La hispanización en las Antillas fue rápido y el
indio de ese lugar fue extinguido con rapidez ya que no pudo aguantar
las nuevas condiciones sociales.
Para cristianizar a los indios, los misioneros se dieron cuenta
que era mejor hacerlo en sus propias lenguas, ya que no era posible
enseñar en español con violencia y tampoco valía
la pena que esto surgiera con el transcurso del tiempo. De esta
manera los misioneros tuvieron gran afán de aprender lenguas
aborígenes e identificarse con los habitantes de estas
tierras. Un gran problema era la gran diversidad de lenguas. Por
eso los misioneros tuvieron que adoptar una de esas lenguas para
que les sirviera como lengua franca. Por ejemplo, en Colombia
fue el chibcha y en Paraguay, el tupiguaraní.
Los misioneros pusieron gran énfasis en adoctrinar a los
hijos de los reyes, a los que se utilizaban como auxiliares en
las labores de catequesis. A ello se debe que se fundara el primer
colegio en la Nueva España con sesenta estudiantes, todos
ellos descendientes de noble abolengo. Unos cuantos años
después se fundó en la ciudad del Cuzco el Colegio
de San Francisco de Borja, que era también de indios nobles.
La enseñanza en la colonia tenía una base clásica
grecoromana y no una española como podría suponerse.
En estos colegios se enseñaba el latín, que permitía
transmitir los principios de la fé y ademas porque la gramática
del latín era la primera de las artes liberales. Es importante
señalar que la lengua española se aprendía
por uso y no por arte. Es por eso que algunos indios pudieron
ser incorporados a la cultura hispánica, pero la mayoría
de ellos hablaban sus lenguas aborígenas.
También tienen que tomarse en cuenta que el número
de frailes misioneros era muy pequeño comparado con la
población indígena. Siempre parecía una presión
muy fuerte era innecesaria el enseñar el castellano.
Por parte de la Corona existía un gran interés de
difundir el español, tanto que en 1533 se imprimieron doce
mil cartillas destinadas a la instrucción de los indios
mexicanos. También se tomaron otras medidas como exigir
que sólo los indios que hablaran español pudieran
desempeñar cargos como alcaldes. En 1667 fueron expulsados
tres mil jesuitas de América. Quizás ésta
fue la primera medida contra las lenguas indígenas considerando
la reducción de los colegios y catequesis.
En la liberación de las repúblicas existía
una gran población marginal que no hablaba español.
El mestizaje fue el factor que más ayudó la hispanización,
ya que fueron los mestizos los que mejor desempeñaban el
papel de intérprete. También hay que destacar que
los frailes y autoridades civiles mantuvieron a las aldeas indias
separadas. Es por eso que después de la independencia muchos
países se componían de una inmensa mayoría
de habitantes indígenas.
La hispanización hoy en día es mucho mas rápida
que en épocas de la colonia. Esto es por la gran unidad
que representa la lengua española en comparación
con las lenguas indígenas.